En ocasiones, decorar espacios pequeños puede suponer un hándicap, dado que se debe evitar que el ambiente quede demasiado recargado. Los espacios pequeños deben ser tratados con cuidado para conseguir un equilibrio armónico entre todos los elementos que componen el lugar.
¿Cómo podemos decorar un espacio pequeño?
Son muchos los aspectos que hay que tener en cuenta para decorar un espacio pequeño. Uno de ellos es procurar que haya una distribución equilibrada. Fijar las prioridades y dar más metros a aquellos espacios donde pasemos más tiempo.
Debemos pensar acerca de cuáles son las cosas que necesitamos realmente en el hogar. Debemos deshacernos de lo que no utilizamos para terminar con el desorden, ordenarlo todo de nuevo y disfrutar del espacio que hemos conseguido.
Los colores claros son una pauta muy importante para conseguir más espacio gracias al efecto visual que se consigue. El color blanco hará que la luz se multiplique y con ella, el efecto de amplitud. Aunque si no quieres color blanco, puedes optar por otros colores claros.
Para conseguir esa claridad, también debemos dejar paso a la luz natural. Cambiar las cortinas por algo más translúcido es una estupenda alternativa para que entre la máxima luz natural posible, especialmente en los días de verano.
Un truco muy utilizado en la decoración es decorar en altura, pero para ello hay que tener techos altos. Se puede decorar cualquier clase de pared que tengamos libre, colocando estanterías, baldas o repisas, donde podremos colocar libros, películas, discos de música, objetos decorativos o lo que queramos.
Debemos apostar por las soluciones multifuncionales, teniendo muy presente que cada centímetro es importante. Por esa razón, debemos buscar mobiliario que tenga más de una función. Por ejemplo, puede se un sofá-cama o una estantería que se convierte en escritorio. Gracias a detalles como este, podremos optimizar al máximo el espacio disponible en cualquier rincón de nuestro hogar.